Hola....
Y como despedida de esta GF 2024.
Les dejo el primer capítulo de un fic, que estoy escribiendo.
El cuál continuaré en Wattpad.
Fue un placer estar nuevamente en la GF, gracias a mi equipo de Bandoleras, por su apoyo y talento.
Gracias a la administración, por este bello evento y muchas felicidades a todas las combatientes de esta GF2024, por compartir su talento con todos nosotros, sus espectadores.
Felicidades!!!
Fic: Casate conmigo
Art: Betty Graham
Capítulo 1 Parte 1
Candice Ardley se encontraba dando el ultimo retoque a su pintura. Un cuadro familiar, que ella misma había pintado; quería exponerlo en la galería que dirigían su madre Margaret y su hermana Susana.
Tomó su auto y se dirigió muy contenta a la subasta benéfica que se realizaría ese día en la galería.
Mientras tanto en la galería, Margaret y Susana Ardley, se encontraban en espera de Candice.
- ¡Pero mamá!, ¿cuándo podré hacerme cargo yo sola de la galería? – Susana le replicaba a su madre. Era una chica caprichosa, siempre acostumbrada a salirse con la suya. Ella sabía que Margaret su madre, hacía todo por complacerla, sin importar hacer a un lado a su hermana Candice, a quien envidiaba por su belleza, y por su talento en pintar.
- Muy pronto Susi, ten paciencia. ¿Ya llegó tu hermana? - Margaret abrazó a su hija, para consolarla.
- No lo sé, Candy últimamente anda muy distraída. - Contestó Susana sin interés.
- Llámala, no puede faltar a este evento, le tengo preparada una sorpresa. –Dijo Margaret con una sonrisa maliciosa.
- ¿Una sorpresa?, ¿y porque le darías a mi hermana una sorpresa?, ¿Y yo que, mamá? – Reprochó Susana.
- ¡Tranquila Susi! La sorpresa que le tengo a tu hermana, la tiene bien merecida.
- Estas muy misteriosa mamá, mejor iré a ver si Neal sabe algo de ella. - Susana se alejó en busca de su futuro cuñado.
- ¡Ya llegué madre! – Saludó Candice muy entusiasmada.
- ¿Qué es lo que traes en tus manos Candice? – Margaret no ocultaba el desprecio, que sentía por su hija menor.
- Ah ¿esto?, es un cuadro que pinté, de nuestra familia, ¿no te parece hermoso, madre? – Candice se sentía orgullosa de su obra.
- No es momento para eso, deja eso por ahí y ven conmigo a la bodega. – Margaret ignoró a su hija, sin prestar atención a la pintura.
- ¡Pero madre, le he dedicado mucho tiempo a este cuadro! Quiero colgarlo en un lugar de esta galería.
- ¡He dicho que no Candice! Y no empieces a querer chantajearme, que no es momento, para tus berrinches.
Candice estaba acostumbrada a los desprecios que su madre le hacía. Pero siempre trataba de ignorarlos, ya que se sentía agradecida de poder tener una familia.
Pensó que tal vez se había atrevido demasiado, en hacer una pintura, una que su madre no le había pedido, pero cuando escuchó los halagos de una de las asistentes a la galería, su confianza se renovó y se reanimó.
- ¡Pero que hermoso Cuadro! ¿Tú lo has pintado Candice? – Preguntó admirada una de las invitadas a la subasta de beneficencia.
- Así es señora Montero. – Contestó Candice muy emocionada.
- ¿Y qué esperas, para exhibirlo Margaret? El talento de tu bella hija, no puede ocultarse. – Sugirió la dama.
- Mmmm, si Eloísa, justo estaba poniéndome de acuerdo con mi hija, para buscarle un lugar, ¡vamos Candice! Colguémoslo por allá. – Margaret fingió entusiasmo.
- ¡Esta vez te saliste con la tuya Candice! Pero te prohíbo, que vuelvas a pintar algo sin mi consentimiento, ¡escuchaste! – Reprendió molesta Margaret a su hija, de modo que solo ella la pudiera escuchar.
- ¡Si madre, lo siento! No volverá a suceder. – Respondió Candice nerviosa.
- ¡Wow, que talento Candice!, tu cuadro es precioso, me gustaría, que pintaras uno para mi familia también. – Dijo otra mujer, que caminaba por los pasillos, admirando las pinturas, que se exhibían.
- Eso sería imposible Vicky, mi hija aún tiene varios pendientes por pintar, y estamos algo retrasadas, con las entregas. – Se adelantó en contestar Margaret, fingiendo amabilidad.
- Mmmm que lastima, pero seré paciente querida, yo sabré esperar. Considérame en tu lista de pendientes dulce Candice. – Agregó Vicky, regalándole una sonrisa a Candice, quien se encontraba intimidada.
- Sí, claro señora. – Candice respondió con voz queda, ante la mirada recriminatoria de su madre.
- Si nos disculpas Vicky, es hora de que empiece la subasta, ¿no vienes? – Margaret tomó por el brazo a Candice, apretándolo más de lo debido.
- ¡Oh si claro! No me la puedo perder, ¡vamos queridas! – Dijo Vicky, invitando a las demás señoras presentes.
- Candice, ve y busca a tu hermana, creo que fue en búsqueda de tu noviecito ese, el tal Neal. – Ordenó Margaret, refiriéndose a el novio de Candice, con desprecio.
- Si madre, con permiso señora Vicky. – Se apresuró Candice, en ir en busca de Neal.
- ¡Tu hija es preciosa Margaret! Creo que es la más parecida a tu esposo, la menor se parece más a ti, como es que se llama, ¡ah sí! Susana.
- Eh, sí. – Contestó Margaret, sintiéndose incomoda, ante el comentario.
Candice detuvo sus pasos al escuchar la voz de su novio, le pareció escucharlo discutir con alguien. Decidió ocultarse, para saber que sucedía.
- Susana, ¡la que me gustas eres tú!, voy a dejar a Candy, para formalizar una relación contigo. – Neal sujetaba a Susana, de las manos e intentaba que Susana lo aceptara.
- ¡Que! De ninguna manera Neal. Yo no siento nada por ti. Cásate con mi hermana, y a mi ¡déjame en paz! – Susana se apartó molesta.
- Pero si yo solo estoy con Candy, para estar cerca de ti. ¡Que no entiendes, que a quien amo es a ti! – Neal intentaba abrazar a Susana, pero está se resistía.
Candice al presenciar todo eso, salió de su escondite, para enfrentar al que hace poco, creía que era la única persona que la amaba.
- ¿Que estás diciendo Neal? – Candice no daba crédito a lo que estaba sucediendo.
- ¡Candy! – Neal se sorprendió al ver a Candice, quien lo miraba, con los ojos llorosos.
- ¡Repite lo que acabas de decir! – Le gritó Candice, sin poder evitar redamar sus lágrimas.
- ¡Lo siento Candy! Pero yo a quien amo es a Susana. – Neal intentó tomar la mano de Candice, pero esta se apartó, sintiéndose asqueada ante ese toque.
Continuará............
Y como despedida de esta GF 2024.
Les dejo el primer capítulo de un fic, que estoy escribiendo.
El cuál continuaré en Wattpad.
Fue un placer estar nuevamente en la GF, gracias a mi equipo de Bandoleras, por su apoyo y talento.
Gracias a la administración, por este bello evento y muchas felicidades a todas las combatientes de esta GF2024, por compartir su talento con todos nosotros, sus espectadores.
Felicidades!!!
Fic: Casate conmigo
Art: Betty Graham
Capítulo 1 Parte 1
Candice Ardley se encontraba dando el ultimo retoque a su pintura. Un cuadro familiar, que ella misma había pintado; quería exponerlo en la galería que dirigían su madre Margaret y su hermana Susana.
Tomó su auto y se dirigió muy contenta a la subasta benéfica que se realizaría ese día en la galería.
Mientras tanto en la galería, Margaret y Susana Ardley, se encontraban en espera de Candice.
- ¡Pero mamá!, ¿cuándo podré hacerme cargo yo sola de la galería? – Susana le replicaba a su madre. Era una chica caprichosa, siempre acostumbrada a salirse con la suya. Ella sabía que Margaret su madre, hacía todo por complacerla, sin importar hacer a un lado a su hermana Candice, a quien envidiaba por su belleza, y por su talento en pintar.
- Muy pronto Susi, ten paciencia. ¿Ya llegó tu hermana? - Margaret abrazó a su hija, para consolarla.
- No lo sé, Candy últimamente anda muy distraída. - Contestó Susana sin interés.
- Llámala, no puede faltar a este evento, le tengo preparada una sorpresa. –Dijo Margaret con una sonrisa maliciosa.
- ¿Una sorpresa?, ¿y porque le darías a mi hermana una sorpresa?, ¿Y yo que, mamá? – Reprochó Susana.
- ¡Tranquila Susi! La sorpresa que le tengo a tu hermana, la tiene bien merecida.
- Estas muy misteriosa mamá, mejor iré a ver si Neal sabe algo de ella. - Susana se alejó en busca de su futuro cuñado.
- ¡Ya llegué madre! – Saludó Candice muy entusiasmada.
- ¿Qué es lo que traes en tus manos Candice? – Margaret no ocultaba el desprecio, que sentía por su hija menor.
- Ah ¿esto?, es un cuadro que pinté, de nuestra familia, ¿no te parece hermoso, madre? – Candice se sentía orgullosa de su obra.
- No es momento para eso, deja eso por ahí y ven conmigo a la bodega. – Margaret ignoró a su hija, sin prestar atención a la pintura.
- ¡Pero madre, le he dedicado mucho tiempo a este cuadro! Quiero colgarlo en un lugar de esta galería.
- ¡He dicho que no Candice! Y no empieces a querer chantajearme, que no es momento, para tus berrinches.
Candice estaba acostumbrada a los desprecios que su madre le hacía. Pero siempre trataba de ignorarlos, ya que se sentía agradecida de poder tener una familia.
Pensó que tal vez se había atrevido demasiado, en hacer una pintura, una que su madre no le había pedido, pero cuando escuchó los halagos de una de las asistentes a la galería, su confianza se renovó y se reanimó.
- ¡Pero que hermoso Cuadro! ¿Tú lo has pintado Candice? – Preguntó admirada una de las invitadas a la subasta de beneficencia.
- Así es señora Montero. – Contestó Candice muy emocionada.
- ¿Y qué esperas, para exhibirlo Margaret? El talento de tu bella hija, no puede ocultarse. – Sugirió la dama.
- Mmmm, si Eloísa, justo estaba poniéndome de acuerdo con mi hija, para buscarle un lugar, ¡vamos Candice! Colguémoslo por allá. – Margaret fingió entusiasmo.
- ¡Esta vez te saliste con la tuya Candice! Pero te prohíbo, que vuelvas a pintar algo sin mi consentimiento, ¡escuchaste! – Reprendió molesta Margaret a su hija, de modo que solo ella la pudiera escuchar.
- ¡Si madre, lo siento! No volverá a suceder. – Respondió Candice nerviosa.
- ¡Wow, que talento Candice!, tu cuadro es precioso, me gustaría, que pintaras uno para mi familia también. – Dijo otra mujer, que caminaba por los pasillos, admirando las pinturas, que se exhibían.
- Eso sería imposible Vicky, mi hija aún tiene varios pendientes por pintar, y estamos algo retrasadas, con las entregas. – Se adelantó en contestar Margaret, fingiendo amabilidad.
- Mmmm que lastima, pero seré paciente querida, yo sabré esperar. Considérame en tu lista de pendientes dulce Candice. – Agregó Vicky, regalándole una sonrisa a Candice, quien se encontraba intimidada.
- Sí, claro señora. – Candice respondió con voz queda, ante la mirada recriminatoria de su madre.
- Si nos disculpas Vicky, es hora de que empiece la subasta, ¿no vienes? – Margaret tomó por el brazo a Candice, apretándolo más de lo debido.
- ¡Oh si claro! No me la puedo perder, ¡vamos queridas! – Dijo Vicky, invitando a las demás señoras presentes.
- Candice, ve y busca a tu hermana, creo que fue en búsqueda de tu noviecito ese, el tal Neal. – Ordenó Margaret, refiriéndose a el novio de Candice, con desprecio.
- Si madre, con permiso señora Vicky. – Se apresuró Candice, en ir en busca de Neal.
- ¡Tu hija es preciosa Margaret! Creo que es la más parecida a tu esposo, la menor se parece más a ti, como es que se llama, ¡ah sí! Susana.
- Eh, sí. – Contestó Margaret, sintiéndose incomoda, ante el comentario.
Candice detuvo sus pasos al escuchar la voz de su novio, le pareció escucharlo discutir con alguien. Decidió ocultarse, para saber que sucedía.
- Susana, ¡la que me gustas eres tú!, voy a dejar a Candy, para formalizar una relación contigo. – Neal sujetaba a Susana, de las manos e intentaba que Susana lo aceptara.
- ¡Que! De ninguna manera Neal. Yo no siento nada por ti. Cásate con mi hermana, y a mi ¡déjame en paz! – Susana se apartó molesta.
- Pero si yo solo estoy con Candy, para estar cerca de ti. ¡Que no entiendes, que a quien amo es a ti! – Neal intentaba abrazar a Susana, pero está se resistía.
Candice al presenciar todo eso, salió de su escondite, para enfrentar al que hace poco, creía que era la única persona que la amaba.
- ¿Que estás diciendo Neal? – Candice no daba crédito a lo que estaba sucediendo.
- ¡Candy! – Neal se sorprendió al ver a Candice, quien lo miraba, con los ojos llorosos.
- ¡Repite lo que acabas de decir! – Le gritó Candice, sin poder evitar redamar sus lágrimas.
- ¡Lo siento Candy! Pero yo a quien amo es a Susana. – Neal intentó tomar la mano de Candice, pero esta se apartó, sintiéndose asqueada ante ese toque.
Continuará............