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Cartas Robadas
Capitulo 2
Capitulo 2
Estaba llegando a su departamento, había cenado con su madre, no había planeado buscarla, quería hacerse un nombre por sí mismo, pero su pecosa había pensado distinto y así se lo había hecho saber en sus primeras cartas, su madre había estado muy feliz por haber reiniciado su relación, ni que decir lo encantada que estaba que estuviera de novio de Candy, ella la amaba, no había que adivinarlo, Eleonor era su mayor defensora, estaba más que agradecida con la pequeña pecosa por haber ayudado a que se reconciliaran en Escocia, ahora que gracias a ella la había buscado hacía poco
La bella actriz ni lenta ni perezosa había pedido escribirse con Candy en cuanto supo que Terry y ella se enviaban cartas, fue este intercambio de cartas lo que le permitió a Eleonor conocer la inquietud de ambos jóvenes, cada uno por su lado sin haberse puesto de acuerdo, de hecho, el castaño no había comentado con nadie su inquietud, es más podría hasta considerarse ignorante de la preocupación de su pecosa
Él había asumido que el trabajo de Candy era lo suficientemente exigente como para que ella tuviera tanto tiempo para escribirle, al menos eso había pensado, hasta que su madre le comenzó a comentar de las cartas que ella recibía de la pecosa, las cuales eran un poco más frecuentes que las suyas, lo cual si se sumaba a las expresiones de Candy en las pocas cartas que el recibía, las cuales hablaban o hacían de cuenta de que el conocía de algunas cosas que le había contado en la carta anterior, pero ¿Cuál?
“cómo te conté en mi carta anterior”, “recuerdas esto sucedió el mes pasado, tal y como te lo comenté anteriormente”, -diablos, no comprendo
A eso le sumamos la charla de esta noche con su madre
-no te has puesto a pensar hijo, que no es lógico que yo reciba más cartas de Candy que tú, de hecho, ella me envío esta carta para ti, me explico que envió una carta para ti al mismo tiempo que estas que me envió a mí, solo para comprobar que las que te envía a ti no están llegando, decía la bella actriz entregando una carta a su hijo
- ¿cuándo recibiste estas cartas Mamá?
-hace dos días, por eso te pedí que vinieras a cenar, dime ¿recibiste la carta que ella te envió a tu departamento?
-no, hace mucho no recibo una carta suya, ¿qué sugieres?
-no sugiero nada hijo, has tus propias conclusiones, cómo puede llegar una carta si y otra no, tomando en cuenta que ambas fueron enviadas al mismo tiempo, la respuesta salta a la vista, la pregunta correcta en todo caso sería: ¿Quién? Y ¿Por qué?, es tu turno ahora de investigar que es lo que está sucediendo
Ahora es que su mente comenzaba a atar cabos, temía hacer juicios incorrectos, pero la primera persona en quien desconfiar seria la casera, si, porque ella es la primera en saber cuando llega la correspondencia, es mas ella es quien la distribuye
- ¿cómo es que no me percate antes?, ¿Cómo he sido tan confiado?, mas tomando en cuenta que es algo de tanta importancia, esto no se quedara así, llegare al fondo de esto y hare que paguen los culpables, caiga quien caiga
Al acostarse ya con las resoluciones tomadas, abrió la preciada carta de su pecosa, al menos eso podría serenar su corazón
Querido Terry
Te parecerá extraña la forma de llegar de esta carta, espero solo sean suposiciones mías, pero desde hace un tiempo me doy cuenta de que no estas recibiendo todas las cartas que te envío.
Te envío cartas casi a diario, sin embargo, tus cartas no me reflejan que estés al tanto de lo que yo te he escrito, ni mucho menos pareciera que las recibes, me encuentro preocupada, no quiero pecar de mal pensada, pero esto es muy extraño
Se puede entender que se pierda una carta, pero tantas, te pido encarecidamente que trates de averiguar qué sucede
Por lo pronto te pongo al tanto de algunas cosas que te has perdido de mis anteriores cartas: primero que nada, felicítame ya soy una enfermera graduada, Albert sigue sin recobrar su memoria, su estado de salud física mejora, razón por la que el doctor Lenard me ha informado que le darán de alta pronto, estoy muy angustiada por su estado, pues en el hospital es poco o nada lo que hacen por su mejora, me refiero a su memoria
He decidido que ahora que ya recibo un salario como enfermera, voy a alquilar un pequeño departamento para ir a vivir con Albert y poder cuidar de él, espero me comprendas, no puedo abandonarlo, como podría dormir tranquila imaginándolo solo y perdido, sin recuerdos en la calle, no puedo y sé que tú tampoco querrías eso, pero ya lo hablaremos más detenidamente cuando nos veamos
Estoy ansiosa por nuestro encuentro, tanto que siento que floto sobre nubes, mi felicidad por mi visita a New York no tiene límites, he tenido la certeza de que te vería nuevamente, fue con esa certeza que abandone el colegio para seguir mi camino, ahora ese encuentro ya está próximo finalmente y mi corazón se llena de dicha por ello
Con la certeza de que nuestros caminos se entrelazaran pronto
Candice White Andrew
A la mañana siguiente un muy serio Terry se dirigió a buscar a la casera, dispuesto a encararla, como era de esperar la señora había negado todo, al menos así lo hizo hasta que el castaño le explico que la denunciaría a la policía por robo de correspondencia, la sola mención hizo que la señora Barns no dudara en soltar la sopa, le explico que su dulce novia, la joven actriz Susana Marlowe, la había convencido de interceptar las cartas que este recibía y que se las entregara a ella antes para ver si se las daba o no, ella le había explicado en medio de llantos que la joven que le escribía desde Chicago era una chica sin escrúpulos que solo quería separarla de el
La cara de la señora Barns cuando Terry le dijo que Susana no era ni amiga menos novia de él era de asombro y estupefacción, nunca imagino que su buena voluntad al ayudar a la dulce joven le traería problemas tan serios, como podía sospechar que ella mentía tan descaradamente, ahora resulta que ella había estado robando las cartas de la verdadera novia del joven, quien además seguramente ya no querría seguir viviendo en un lugar en el que no podía confiar
La señora Barns no dudo en ofrecer atestiguar en caso de que Terry decidiera hacer las acusaciones pertinentes, Terry llego al teatro furioso, nunca antes se había sentido tan indignado, es ahora que resonaban en su cabeza las palabras que Susana le había dirigido la otra noche en que se le ocurrió confesarle su amor por él, en donde también le confeso que había corrido a Candy del hotel cuando ella llego a buscarlo en Chicago
“no quería que fueras para ninguna otra”
“no te dejare ni a Candy, ni a ninguna otra”
Con que derecho ella le había dicho eso, el no era un mueble o un adorno para que ella se sintiera con propiedad sobre él, que se creía, si ya el hecho de saber que había sido capaz de leer la carta que supuestamente ella había encontrado y le devolvía le molestaba, el saber que había corrido a Candy lo había enojado más, aun así él la había tratado de comprender e incluso compadecer, sin embargo esas palabras le calaban, pero con todo y eso no había sido capaz de aceptar hasta que punto lo de Susana estaba pasando los limites
Si, ya no podía seguir disculpando su actitud, sus constantes acosos, porque si eso eran, como podría llamarse al hecho de que se presentara en su departamento sin previa invitación, que se atreviera a correr a Candy, que leyera su carta, y ahora el colmo, que robaba las cartas de Candy, no eso sí que no, lo primero que hizo al llegar fue buscar a Susana, pero por suerte, fortuna o lo que fuera, encontró primero a Robert Hataway, quien al verlo en sabrá que estado lo llevo con el a su oficina, lo interrogo para saber el porque de su evidente molestia a lo que Terry no le quedo mas que contarle todo lo sucedido con Susana, le conto que estaba dispuesto incluso a denunciarla a la policía
Para Robert fue claro que Terry era la víctima en ese caso, eso y el hecho de que Eleonor se había presentado muy temprano para conversar con el ese mismo día, exponiéndole su inconformidad con el comportamiento de Susana, quien se había atrevido a ir a buscar a Terry a su departamento y que su constante acoso iba a provocar un problema serio y eso que ella aún no estaba al tanto de lo que el joven le contaba, decidió llamar a la actriz para que respondiera, no le convenia que sus dos protagonistas estuvieran en medio de un escándalo, porque eso sucedería si no se solucionaba todo
CONTINUARA...
Hola amigas, disculpen la tardanza, se me quebro la pantalla de mi cel y ahora ando con una araña,
por lo que he tenido que esperar turno para poder robar un tiempo en la pc, pero no se preocupen ya casi termino el siguiente, cariños Palas
te sigo 
pues ya le había perdonado a Susana que no le dijera que Candy lo había buscado en el hotel en Chicago y ahora con las cartas... no bueno le va arder Trolla. 
vemos que es lo que tiene que decir. 
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