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Qué gusto poder estrenar el Lado Oscuro con éste fic y como primer post... espero que lo disfruten.
Información importante... los nombres de los personajes se han adaptado al estilo y trama del fic.
L E A L T A D
EL SECRETO DE LAS SOMBRAS
PARTE I
Los rayos del sol se cuelan por la habitación y se posan sobre su cuerpo, es verano y en la habitación se puede sentir claramente el calor de la estación. La joven se remueve en su lugar por la incomodidad, su cuerpo suda debido a las altas temperaturas que reinan en la estancia; con su diestra talla sus ojos tras intentar abrirlos
-Hmm... ¡Qué calor...!
Cuando finalmente logra abrir sus ojos percibe la imagen medio borrosa de una persona que está entrando en la habitación. Se acerca poco a poco mientras que con una toalla se seca los cabellos. El hombre se detiene a escasos metros de la cama y sus pupilas recorren desde sus caderas envueltas por un trozo de tela y su torso se encuentra completamente descubierto; al ser consciente de ese estado, se yergue rápidamente con sus ojos abiertos de par en par presa del pánico
-¿Qu... quién eres? ¿En... en dónde estoy?
-Finalmente estás despierta
Dice el hombre con voz lacónica, y es el turno de él en observar la figura femenina frente de sí; al ser consciente del escrutinio al que está siendo sometida la joven baja la vista y se da cuenta que viste una camisa que no es suya y todas sus piernas están expuestas. Rápidamente se cubre con las sábanas e intenta hacer memoria de cómo terminó en ese lugar.
-¿Cómo es que llegué hasta aquí? ¿En dónde estoy? Yo... yo... recuerdo... alquilé una cabaña para pasar el fin de semana y poder esparcir las cenizas de mi madre... cuando... cuando estaba por regresar a la ciudad unos hombre se me acercaron con intenciones de hacerme daño... corrí... tenía tanto miedo que no me fijé por donde iba, sólo quería escapar de ellos, pero tropecé y caí en una pendiente y... y de repente apareció una enorme bestia... ¡Es cierto! Era como un lobo, pero más grande... su gruñido erizó la piel tanto de los atacantes como los míos. Quise correr ¡Huir de esa bestia y de esos hombres! Por lo que no me fijé por donde pisaba y volví a caer... y... y de ahí no recuerdo nada... ¿Habré perdido la conciencia?
-¡¿Me estás escuchando mujer?! Dime ¿Quién eres?
-¿Eh? - ¿Me estaba hablando? ¿Qué ha dicho? Por estar divagando en mis recuerdos no le escuché ni una palabra - Perdona... pero
-¿Quién eres? ¿Por qué te perseguían esos hombres?
-Yo... yo, no tengo ni idea... no sé quiénes eran
-¡No me mientas!
Espeta furioso e instantáneamente la apunta con un arma, el rostro de la mujer palidece completamente al sentir el frío metal sobre su sien; su mirada se endurece por el disgusto ya que no entiende la razón del proceder de ese desconocido, mientras que sus fosas nasales son invadidas por un aroma con toques de madera y cuero.
El hombre observa detenidamente la reacción de la joven y tras unos segundos más retira el revolver, entonces unos golpes en la puerta se dejan escuchar; él se aleja de la cama mientras indica que pueden pasar, es en ese momento que la chica ve a un caballero vestido de traje oscuro y una bandeja en mano, rápidamente intuye que es el mayordomo, pero lo confirma al ver la manera tan formal como trata al extraño que la había estado apuntado con un arma. Ella acepta sin objeción alguna la taza que le ofrece y le mantiene la mirada al otro, quien la observa fijamente, casi sin pestañear.
No entiende a qué se debe esa fijación, teme porque ahora cree que ese hombre la a confundido creyendo que forma parte de esos bandidos que quisieron atacarla, cuando ella en sí es la victima. Así que cualquier lisonjero sentimiento de agradecimiento que pudo sentir en un principio, poco a poco se desvanecía ante el escrutinio que es sometida, ni siquiera puede expresar un "gracias" a ese extraño frente de sí. Estaba segura, no se dejaría intimidar ante esa mirada fría que la examina.
-Está bien... señor Duane Moreau...
Bramó el hombre semi desnudo con claro disgusto, el mayordomo a su lado respondió rápidamente, aunque su jefe había estado observado a la señorita, había sentido esa aura siniestra que emanaba de él y un impulso primitivo de postrarse al suelo le estremecía hasta los tuétanos, se sentía intimidado
-... Duane, encárgate que alguien la lleve a su casa
-Entendido señor
Acto seguido, ese hombre de aura imponente dejó la estancia y segundos después Duane exhalo aliviado, todavía tenía los bellos de punta
-Señorita, mi señor ha dispuesto ésta ropa para usted, ya que la que traía puesta está en terribles condiciones
-Muchas gracias señor... More ¿Es así?
-Así es señorita, mi nombre es Duane Moreau
-Encantada de conocerle señor Moreau, yo soy Dulce Winter
-Señorita Winter, la dejaré con la mucama para que se vista, en cuanto esté lista, un coche la llevará hasta su casa
-No... no hace falta señor Moreau, puede pedirme un taxi o acercarme a la ciudad, yo puedo...
-De ninguna manera señorita, esas han sido las ordenes de mi amo, no puedo contradecirle
-Bueno, pero "él" no es mi jefe, ni amo, ni señor mío... no tiene autoridad alguna sobre mí y mi vida
Se queja la joven cruzándose de brazos, el caballero se pasa los dedos sobre su sien, esa voz de su cabeza le incomoda mucho, sabe perfectamente que no puede contradecir a su amo, no tiene más opción, por lo que finalmente le dice a ella
-Lo lamento mucho señorita Winter, pero ordenes son ordenes... además, sería muy desagradecido por su parte no aceptar la ayuda que le brinda su salvador
-¿Mi salvador? ¿De qué está hablando?
-Pues... que fue mi jefe quien la encontró inconsciente en el bosque, él la trajo hasta su casa y cuidó de usted en toda la noche
-¿Su jefe? ¿Su jefe hizo eso? Pero... ¿Quién es su jefe? - no lo conozco, no tengo ni la más mínima idea de quién se trata
-Mi señor es Greum Dubois, el director ejecutivo de Industrias G&B
-¡¿Cómo dice?!
Interroga sorprendida la joven, nunca en su vida hubiese imaginado que conocería al magnate de Industrias G&B. Es una de las empresas que se mantiene a la vanguardia sobre la tecnología desde los últimos 5 años. Sus productos no tienen rival, posee el mejor sistema operativo e innova constante mente en máquinas que ayudan a la NASA, el área Médica y sobre todo en Inteligencia Artificial.
-¿Greum Dubois? Él... él es ¿Greum Dubois?
El mayordomo no dijo más y salió de la habitación dejándola sola con la mucama. Dulce no daba crédito a todo lo que estaba viviendo. Su existencia había cambiado en tan pocos días; su madre había fallecido, fue a la montaña a esparcir sus cenizas porque sabía que a ella le encantaba estar en la naturaleza, todo ese tiempo habían vivido a las afueras, en un pueblo pequeño y tranquilo, pero tras terminar sus estudios universitarios había conseguido una plaza para trabajar en el área de restauración en el Museo Metropolitano de la ciudad y dos días tras haberse mudado su madre Dana Winter sufrió un trágico accidente.
Nunca conoció a su padre, Dana había sido siempre su mundo, su todo. Pero ahora tenía que enfrentarse sola a la sociedad fiera y despiadada; no siempre estaría un Greum Dubois cerca para salvarla, por lo que más consciente que nunca, debe andar con cuidado.
Con la ayuda de la mucama, Dulce Winter estuvo lista en un santiamén, después la guió hasta la entrada principal donde un chofer le esperaba; antes de subir al vehículo observa la mansión en la que había estado, sin duda es imponente, llena de lujos, digna de un hombre tan rico y poderoso como Greum Dubois. Suelta un suspiro y finalmente sube al coche y le indica que se pueden marchar.
En uno de los ventanales se encuentra el señor Dubois observando la partida de la joven, no puede evitar sentir cierta incomodidad con todo lo que ha estado pasando. Duane se acerca hasta él y le entrega una copa de licor
-Con que esa mujer se cree tan autosuficiente como para rechazar mi ayuda
-No la mal interprete señor Dubois, comprenda que no cualquiera se puede confiar de alguien desconocido, por muy buenas que sean sus intenciones
-¿Y quién te ha dicho que mis intenciones son buenas para con ella, Duane?
-Ejem... Bueno... creí que eso estaba explicito desde el momento que usted mismo la alzó en brazos y la trajo hasta su habitación
-Duane... últimamente estás muy ocioso ¿O te pago mucho para que te dediques a fisgonear lo que hago en mi alcoba?
-En lo absoluto señor, sabe perfectamente que siempre es un placer poder ayudarlo en lo que necesite
-Pues siendo así... quiero que investigues quién es esa mujer
-¿La señorita Dulce Winter?
-¿Quién más, Duane? Pareces un viejo carcamal con alzhéimer, te pondré a correr más seguido para que no te oxides.
-Entendido señor
Accede Moreau haciendo una reverencia antes de dejar el despacho de su jefe. Si algo estaba seguro, es que Greum Dubois no tiene pensado esperar mucho por la información que le ha solicitado.
CONTINUARÁ....
Parte II aquí
Parte II aquí
Última edición por Cherry Cheddar el Lun Abr 04, 2022 4:13 pm, editado 2 veces
a Dulce, 
esperare el próximo capitulo
EL LOBO QUE APARECIO Y EL SR. GREUM ES TODA UNA INTRIGA? 
